De compras

Un día los majes planearon salir a la playa, iban a ir al lugar de siempre, una playa que es del tío del verde, lugar que por cierto tiene dudosa reputación ya que la mayoría de las veces solo se ven hombres ahí.

En fin, algunos decidieron ir a comprar algunas cosas un día antes de salir, entre ellos iban el mesero, la masa, el verde, la espina (pregúntenle a starfox porque espina), r avila y el invisible (a pedido popular ya que no les gusto lo del No 1).

Antes de las compras iban a ir a comer ya que todos andaban hambrientos, mientras iban en el carro como siempre el invisible dice las cosas muy oportunamente, se acordó de cierta fiesta de disfraces, y que había llevado una espada como parte del disfraz, la cual dejó en la fiesta, y el verde se la llevó. Al invisible se le ocurrió decirle al verde que se había llevado su espada, y lo dijo en voz alta, ya se imaginaran la reacción de todos los que escucharon. (Si no ponía esto me iban a estar jodiendo en los comentarios).

Bueno, los majes fueron a comer donde sale el chucho loco que se mencionó en otra historia, el mesero estuvo sirviendo las porciones, pero esa vez no andaba con el uniforme, asi que por eso le tuvieron que quitar unos cuantos centavos de la propina que le dieron al final.
Mientras comían, se dio la típica tertulia, el verde contaba sus planes de dominación del mundo, esta vez empezando por poseer los poderes eclesiásticos, para luego ascender a dominar los poderes políticos y económicos hasta hacer el imperio verde.

También estaba muy perturbado por cierta declaración que le había hecho ravila a Mr. Been por correo y que todos pudieron ver. Un comentario que decía “solo cheros vamos y vaaaa”.

Luego contaron las veces que los había parado la policía y que los habían hecho soplar un volado.

Después de comer, los majes fueron a comprar comida para el viaje, tortillas “de las fresquitas”, leche para los que padecen de la columna, y otras cuantas cosas. Esta vez decidieron no comprar ni una sola gota de cerveza (muy sanitos verdad jeje). Lo que no compraron de cerveza compraron de otros alcoholes (por si necesitaban tratar alguna herida XD).

Al final decidieron que el verde se llevaría lo que le decomisan a la masa en su casa (imagínense que es). De regreso a las casas el verde decidió irse por una calle en sentido opuesto, y solo por la insistencia de los demás cambió de idea.
Hasta aquí llega lo que el autor conoce de esta historia.


Próximamente la historia de la playa.